Los tres principales estados mexicanos incluyen a Chihuahua con 60.000 migrantes, Tamaulipas con 35.000 y Coahuila con 25.000
El Gobierno de Estados Unidos estima que unos 152.000 migrantes se encontraban este fin de semana en refugios y calles de los estados en el norte de México que limitan con Estados Unidos, según una fuente familiarizada con los cálculos federales.
La misma fuente dice que más allá de los estados fronterizos del norte, el gobierno federal cree que cientos de miles de migrantes están «en ruta” en el sur de México y otros países centroamericanos.
Estados Unidos confirma el envío de 1,500 soldados a la frontera sur para el próximo 10 de mayo. El despliegue llega a medida que el gobierno se prepara para ponerle fin al Título 42, una política migratoria impuesta por el ex-presidente Donald Trump.
A través de esta medida, se impidió el ingreso de los migrantes a Estados Unidos por la frontera sur como una restricción más derivada de la pandemia de covid-19, ya que en aquel momento los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) determinaron que la deportación era necesaria para proteger la salud pública.
De acuerdo a lo expresado por el líder demócrata, la emergencia de salud pública, incluyendo el Título 42, llegará a su fin el próximo 11 de mayo
De acuerdo a lo expresado por el líder demócrata, la emergencia de salud pública, incluyendo el Título 42, llegará a su fin el próximo 11 de mayo. “En ausencia de otros desarrollos relevantes, el final de la emergencia de salud pública terminará con el Título 42 “, sentencia un documento presentado por el Departamento de Justicia de Estados Unidos.
Contrario a lo que muchos creen, el fin del Título 42 traerá implicaciones negativas para todos los migrantes, pues funcionarios de la Administración Biden, así como defensores de la inmigración, señalan que la derogación de la mencionada medida hará que cruzar la frontera sur sea más difícil, pues los cruces irregulares ahora serán castigados bajo otras regulaciones.
Según señaló Katie Tobin, asistente del presidente en temas de migración, el levantamiento de la medida “aumentará las penalidades para las personas que crucen”, quienes “estarán sujetos a una prohibición de cinco años” para poder reingresar a la Tierra del Tío Sam.
Fuente: CNN/ as